Aquellos tiempos de dependencia, ingenuidad absoluta y de credulidad completa, donde la confianza es plena y pura...
La sonrisa permanente que... después se difumina convirtiéndose en un gesto de amargura y frustración, volviendo al cuerpo inmune al estímulo al igual que el corazón y nos tilda maliciosos y mal pensados, alimentándonos de desconfianza, de orgullo y egoísmo.
Enseñamos bien a sobrevivir en esta cloaca, pues de no ser así, abundarían los mirlos blancos.
los mirlos son pájaros ¿no? vuelan y defecan en el aire se quedan limpios antes de volver a posarse........
ResponderEliminarSi lo hacen, pero cuantos has visto?
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