Cuando has nacido para luchar,
rendirse es inaceptable,
aunque haya veces que pase por la mente.
Esto crea consecuencias, que provocan el arrastre de muchos frentes abiertos.
Provocan peso extra que aumenta con el tiempo y la vejez.
Algún día habrá que ceder, pues todas las batallas no se pueden ganar.
La última será mi mayor derrota y no podré evitarlo.
Me presentaré como un luchador, un ganador, un rival fuerte, pero no el favorito en el ring.
¿Porqué no ir aleccionado de antemano?.
¿Porqué no aprender lo que significa perder?.
De este modo no me defraudaré a mi mismo.
Lo siento...pero no me creo lo que estoy diciendo...cuando llegue la gran lucha, sacaré mis hachas, mis garras y mis dientes, venceré y tomaré su puesto, para poder ser lo último que veáis vosotros.
miércoles, 5 de mayo de 2010
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No creo que seas de los que se rinde, no creo que seas de los que no lucha. Que no se puedan ganar todas las batallas no significa que no deban ser luchadas. Creo que sabes perfectamente el significado de perder...por eso mismo no quieres volver a sentirlo.
ResponderEliminarPero tengo una pergunta ¿ Por qué crees que podrías defraudarte a ti mosmo? eso sólo ocurriría si no fueras sincero contigo mismo y mientras luches y no te rindas, eso no pasará.
O si creyera o hiciera creer ser más de lo que soy...
ResponderEliminarSólo soy un luchador de batallas perdidas que me gusta ganar.
Es cierto que muchas guerras se han ganado por el sentimiento que sus lideres conseguían en sus guerreros, pero al fin y al cabo, el muerto no adora a nadie y el lider ganador sólo brinda una vez por quién en el campo de batalla fallece.
¿Crees que en su agonía seguía viéndolo como un Dios?.
¿Crees que el que ve morir a su amigo o hermano, ve justo que lo haga por otro?
Todos somos un fraude...seguramente, yo no sería como imaginas cuando me lees...seguramente, tu no serías quien imagino cuando lo hago yo...posiblemente nada sea lo que parece tras una líneas, tras una frontera, un límite...
Todo el mundo es menos de lo que cree ser y más de lo que los demás estiman.
ResponderEliminarTodo es fraude y verdad a la vez, todo depende de la concepción de quien observa, los prejuicios y los anhelos de los demás. Somos nosotros quien inventamos las mentiras para disfrazar las verdades.
Todas las mentiras se disfrazan de verdad puesto que si no se hiciese serían verdades dentro de la propia mentira.
ResponderEliminarQuien percibe lo que no es, se engaña a si mismo aunque no sea intencionadamente.
Quien cree ver una verdad debido a una mentira es engañado.
"Todo es un fraude y verdad a la vez"...esto no deja de ser una justificación para la mentira Lireth.
no te equivoques...yo no justifico nada, Dominus.
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